La magia aconteció primeramente en la primavera de 1962, y como si no fuera suficiente, cuatro años después volvió a manifestarse. Así es, amigos; entre abril y mayo de 1962, y luego en los mismos meses, pero de 1966, el pianista Bill Evans y el guitarrista Jim Hall se encerraron en un estudio en Nueva York para darle forma a dos discos que hoy son parte del corpus del género. Hoy les compartimos parte de esa música, como una manera de celebrar la vida y la obra del gran Jim Hall, fallecido el pasado 10 de diciembre, a los 83 años de edad.
Salud.
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